Me ha parecido muy interesante la experiencia de la maestra Carmen Cañabate. Uno de los retos a los que hoy deben hacer frente los docentes es, sin duda, la atención a la diversidad cultural en los centros educativos. La variedad cultural es una característica de nuestra sociedad, vivimos en un entorno multicultural donde se encuentran distintas tradiciones.

Sin duda alguna, una correcta atención educativa está determinada por el clima del centro, la organización curricular, los recursos, etc..., pero, en mi opinión, uno de los factores fundamentales es la formación, las herramientas y los recursos de que disponen los docentes en sus intervenciones. Lo que màs me ha llamado la atención en este video ha sido exactamente el papel del docente que constituye un importante agente en la socialización de los niños. De las interacciones que desarrolle en el aula dependerá la aproximación más menos eficiente de los niños a los saberes de diversas matrices culturales y, aún más importante, la comprensión de que la diversidad cultural y social es algo que exige una relación de diálogo y respeto.

Me ha llamado mucho la atenciòn la actitud de la maestra y su capacidad de enfrentar “creativamente” esta diversidad de experiencias culturales en el aula haciendo que su alumna tenga la misma oportunidad que sus compañeros. Por eso elabora una estrategia y hace que su mamá también se vaya a la escuela a contar un cuento en el aula aunque sea en su idioma (el manjeco, del Guinea Bissau). Se nota la felicidad y la emoción en la cara de la maestra y en sus palabras cuando dice que las “vidas” de esos alumnos, es decir su cultura y sus tradicciones, deberían entrar en el aula porque de esta manera se refuerza sus ganas de aprender y porque para sus compañeros, asì como para los docentes, constituye una experiencia enriquecedora.