En el 2080 ya no existen ni los colegios, ni los
institutos. Ahora el alumno usa sus nuevas gafas google de realidad virtual
para asistir a clase desde su casa. Los investigadores se dieron cuenta que ese
método era mucho más cómodo para los alumnos, y también para los docentes. Así
que ahora nada más levantarte no tienes más que tomarte tu zumo 3000 compuesto
por leche, galletas, zumo, café, zanahorias, apio, tostadas (todo sin gluten
por supuesto), para luego meterte en tu armario (el cual selecciona por ti la
ropa teniendo en cuenta tu estado de ánimo) y vestirte.
Luego no
tienes más que ponerte las gafas y aterrizar en el centro virtual. Tus clases incorporan
alumnos de todo el mundo que quieren aprender castellano. Por eso los
profesores que imparten clase allí dominan cinco idiomas chino, inglés, ruso,
francés y castellano. Saben crear aplicaciones móviles, formatear tablets y
ordenadores, y por si eso no fuera necesario también tocan perfectamente
instrumentos como el violín o el piano.
Todos tienen a sus espaldas tres o cuatro másteres relacionados con su
especialidad, además de una Licenciatura en Informática y Robótica por si
hubiese que reparar algún androide.
Cómo sospecharás los profesores dejaron de ser
humanos, se convirtieron en robots. Incorporando placas bases en su cerebro
para almacenar más conocimientos, y se olvidaron de comer y dormir. Pronto su
sistema circulatorio fue afectado, se quedaron sin corazón. No supieron
disfrutar de las pequeñeces de la vida, y por un afán de avanzar y mejorar se
perdieron a ellos mismos.
¡Espero que al final del máster no acabemos como los robots de tu cuento! Me ha gustado mucho, muy divertido :)
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